Muchas veces pensamos que la gestión de marca abarca los elementos gráficos, publicitarios y de comunicación de la empresa, pero va mucho más allá.

La marca es el reflejo directo de todo mensaje que una empresa envía hacía el exterior y el interior. Esto es lo que se llaman los puntos de contacto y deberíamos entenderlos como todas las oportunidades que tenemos para interactuar con nuestra audiencia. Los puntos de contacto pueden ser muchísimos y varían dependiendo del sector y naturaleza de la empresa pero hoy vamos a hablar de uno que solemos olvidar: El equipo.

Para una marca bien gestionada los empleados deberían ser tan importantes como sus clientes. No solo representan la empresa si no que pueden ser fervientes defensores de la misma. Tenemos en casa a los mejores prescriptores de nuestra marca, siempre y cuando sepamos cuidarles y prestarles la atención que se merecen.

De 30.000 trabajadores a los que se les dio la afirmación:  “Sé cuál es la misión de mi empresa y qué diferencia a nuestra marca de nuestra competencia” , solo un 41% de los empleados estaban de acuerdo con ella.

Esto indica que más de la mitad de los trabajadores no saben cual es el posicionamiento de su compañía ni su valor diferencial. ¿Cómo puede entonces el equipo trasladar la “promesa” corporativa?

Al igual que a los clientes les "machacamos" para que valoren las maravillas de nuestra propuesta y comprendan nuestra marca y su posicionamiento, lo mismo deberíamos hacer con nuestros trabajadores.

No debemos dejar que los empleados intuyan cuales son los valores y promesa de marca. Debemos comunicarselos y trabajar sobre ellos abiertamente hasta que de forma natural todos y cada uno de los miembros de la empresa los sientan como propios.

La cultura de marca implica a todos los niveles de la organización y necesitamos poner en marcha estrategias de integración, comunicación interna y motivación para a crear ese sentido de pertenencia. Además de que todos tengamos clara la hoja de ruta de nuestra marca, necesitamos líderes que den ejemplo y se autoexigan que todo lo que pase de puertas para adentro esté en línea con los valores de marca. Solo de esta forma, conseguiremos que la coherencia que muchas veces buscamos fuera, la proyectemos desde dentro.

 

[quote align="center" color="#999999"]Si nos permitimos el lujo de no crear un vínculo potente de nuestros trabajadores con la marca estaremos perdiendo la oportunidad de tener los mejores embajadores de marca a los que podríamos aspirar.[/quote]